ORGULLO DEL AJEDREZ SURIMBO

Sus ojos buscan afanosamente la mejor jugada para destrozar a su enemigo, sus manos tiemblan delirantes al tocar cada una de las piezas buscando intimidar a su oponente, mientras su cerebro trabaja aceleradamente calculando variantes, descubriendo puntos débiles del rey contrario y tratando de bloquear los ataques del bando rival.

A penas tiene cinco meses que empezó a entrenar de manera formal y ya ha logrado importantes triunfos en su categoría en el ajedrez estatal.  César Clemente Salas tiene doce años de edad y es una de las jóvenes promesas del ajedrez chiapaneco.

Originario de Suchiapa, aprendió a jugar  ajedrez a los diez años cuando su papá le enseñó los movimientos básicos.

“Nunca había participado en torneos porque me daba miedo perder”, comenta con pena, “pero ahora sé que perder es una forma de ganar experiencia en ajedrez”.

Dentro de sus primeros logros destacan:

·         Tercer Lugar Categoría Infantil en el VII Torneo Abierto Surimbo de Ajedrez (Suchiapa).

·         Sexto Lugar en el II Campeonato Estatal de Ajedrez Amateur (Tuxtla Gutiérrez)

·         Segundo Lugar Categoría Infantil Torneo Día de la Raza (San Cristóbal de las Casas)

“Quiero seguir jugando y aprender cada día más. Quiero llegar a ser Gran Maestro de Ajedrez”, comenta ilusionado mientras sostiene la dama blanca entre sus manos, su pieza favorita.

Ahora se prepara para competir en los torneos selectivos rumbo a la Olimpiada Nacional de Ajedrez 2014, donde buscará ser parte de la Selección Chiapas de Ajedrez.

César Clemente Salas, un orgullo del ajedrez Surimbo.